En Bolivia ya pasó una semana desde el triunfo del economista Luis Arce en las elecciones presidenciales.
Finalizado el escrutinio, se confirmó su victoria en primera vuelta, con 54% de los votos. El segundo, Carlos Mesa, obtuvo apenas el 28%.
“Es un triunfo del pueblo boliviano: recuperamos la democracia, recuperamos la patria. Ahora la tarea va a ser reconstruir. Reconstruir la economía, reconstruir la salud, reconstruir la educación para todos los bolivianos. Hora de trabajar.“
Arce fue el ministro de Finanzas de Evo Morales durante sus 14 años de gobierno, durante los cuales el país vivió una bonanza económica.
En estos comicios, Arce era el candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido que Morales fundó en los años 90. Por ese motivo, durante la campaña electoral sus rivales trataron de vincularlo con el expresidente, quien gobernó durante tres períodos consecutivos. Sin embargo, Arce se preocupó por marcar un perfil propio.
Desde Argentina, donde se exilió a fines de 2019, luego de la crisis político institucional que lo obligó a dejar la Presidencia, Morales celebró el triunfo, pero anunció que no participará de la nueva administración. Según dijo, se dedicará a la militancia sindical, lugar desde donde forjó su carrera política.